No es posible la construcción de la Ciudadanía Global sin la participación activa y decidida de aquellos que, por su propia vocación y misión, están llamados a liderar los procesos de transformación necesarios para generar una sociedad más inclusiva, fraterna y equitativa.
Por eso, en nuestra Fundación optamos por abrir espacios de encuentro con personas del ámbito político y, con ellos, reflexionar en torno a cuestiones claves.
Así, nos proponemos organizar foros de conversación, mesas redondas, jornadas de encuentro, etc.
Siempre con una condición imprescindible y de sentido común para que nuestro trabajo pueda dar fruto: optar por un diálogo sincero, veraz, constructivo, respetuoso, amigable y abierto.
En esa dirección, y con el objeto de encontrar un campo propicio donde poder dar pasos para salir de la polarización radical que atenaza a la política actual, creemos que una línea de acción debería ser el trabajo en común de personas cuyos principios existenciales sean parecidos aunque su concreción partidista sea diversa.
Por eso, como proyecto más importante en esta línea de acción estamos poniendo en marcha “DE COMÚN ACUERDO*” un itinerario de encuentro entre políticos de diferentes partidos e ideología que viven su compromiso social como una plasmación de su fe cristiana.
Dicho itinerario comienza con un trabajo de identificación de personas cristianas en primera línea política de nuestro país para, a continuación, ofrecerles un espacio para compartir ideas, inquietudes, convicciones, propuestas, sueños… sobre cuestiones de calado social.
* «De común acuerdo” es una de las traducciones de la expresión que aparece en Hch 15, 25, que habla de las decisiones tomadas tras el “Concilio de Jerusalén”. Allí, Pablo, tras sus primeras experiencias de anuncio de la Buena Noticia entre los gentiles, acude a encontrarse -en medio de grandes controversias- con los “cimientos de la Iglesia” en Jerusalén -de modo particular Pedro y Santiago- para hablar, discernir y orientar la acción entre los que estaban siendo evangelizados.